Cuando sufres un traumatismo o pierdes un diente por cualquier otra circunstancia como una enfermedad periodontal, la estética de tu sonrisa no es lo único que puede verse comprometido. Tu salud dental también puede sufrir las consecuencias. Por ello, reponer una pieza dental tras su pérdida es fundamental para que tu boca se mantenga en perfecto estado.
A la hora de reponer una pieza dental, existen diversos tipos de tratamiento. La elección de uno u otro dependerá del criterio del odontólogo, así como del historial clínico del paciente. Las opciones más habituales son:
- Prótesis removibles, recomendable para aquellos casos en los que se han perdido varias piezas dentales en una arcada. La particularidad es que se puede quitar y poner.
- Puentes fijos. Se trata de una alternativa en la que es necesario disponer de dientes saludables adyacentes a la pieza que se ha perdido, para que sirvan de soporte.
- Implantes dentales. Probablemente la forma de reponer una pieza dental más extendida en la actualidad. Los resultados que ofrece, además de estéticos, resultan muy naturales y son muy duraderos.
¿Sabías que, las personas con edades superiores a los 65 años, no suelen conservar todas sus piezas dentales? Solo se salva un pequeño porcentaje.
La importancia de reponer una pieza dental
Reponer una pieza dental es importante, y el mayor motivo por el cual hay que hacerlo es la prevención. ¿De qué? De consecuencias como las que detallamos a continuación:
- Dificultad en la fonación de sonidos, lo que perjudica al habla y la pronunciación.
- Problemas en la masticación, pudiendo repercutir en el proceso de deglución de los alimentos, ya que se tritura la comida inadecuadamente.
- Dolor y molestia mandibular al tener que hacer un mayor esfuerzo para masticar.
- Mayor irritación de las encías y posibilidad de padecer enfermedades periodontales, ya que el hueco de la pieza dental no repuesta queda expuesto a bacterias y restos de comida.
- Oclusión dental motivada por los desplazamientos que sufren las piezas adyacentes.
- Desgaste dental en los dientes y muelas que estaban sanas.
- El factor estético, lo que puede repercutir en la autoestima.
- Hundimiento del labio hacia el interior, lo que puede otorgar un aspecto visual más envejecido.
En el caso de las muelas sucede lo mismo, si no se reemplaza por otra pieza, es posible que se termine perdiendo el hueso alveolar que rodeaba dicha muela, dando como resultado desplazamientos indeseados del resto de piezas dentales cercanas. Todo ello puede ocasionar problemas para la colocación posterior de un implante o prótesis, así como producir alteraciones en la mordida.
Acudir a un especialista, la solución definitiva
Como ves, lo barato, a la larga termina saliendo caro, sobre todo en cuestiones de salud oral. Es por eso que insistimos tanto en la relevancia de reponer una pieza dental lo antes posible tras su pérdida, ya que si no lo haces puedes originar enfermedades dentales mayores. Y que, por lo general, se alargan más en el tiempo, como podría ser tener que ajustar la alineación con ortodoncia o recurrir a técnicas de regeneración ósea.
Lo mejor que puedes hacer por tu salud dental en estos casos es acudir al dentista. Reponer una pieza dental es un tipo de tratamiento al que estamos acostumbrados en Beydent, por lo que no tendrás que preocuparte de nada. Cuida tu boca, tanto la parte visible como aquella que pasa más desapercibida.
Leave a Reply